Lo que pocos tenían en mente, es que Manu, considerado como
el mejor jugador argentino de baloncesto de los últimos tiempos, también podría
trabajar en algo similar a la agencia de detención de animales. Prueba de ello
dio hace aproximadamente dos años y medio, en un episodio que fue histórico,
pero que pocos recuerdan.
En un partido entre los Spurs de San Antonio y los Kings de
Sacramento, un murciélago estaba fastidiando por momentos el partido. Si bien estos
animales suelen ser vitales en la polinización, también son conocidos por
transmitir enfermedades como la rabia. Manu Ginobili pensó más en lo segundo y
en la molestia que estaba representando este animal para el partido, por lo que, cuando
el quiróptero pasó a un lado del escolta argentino, ‘Gino’ no dudó en soltarle
un manotazo para dejarlo inmóvil en el piso y después entregarlo
a un integrante de las autoridades de salubridad del estadio.
El eterno debate entre si son ratas voladores o mamíferos
con un papel importante en la ecología estuvo presente y Manu Ginobili llegó a
ser juzgado duramente por algunos aficionados a la NBA, y por supuesto, algunos
amantes de los animales. Lo cierto es que el murciélago representaba un peligro para
la afición y los jugadores, razón por la que Manu no dudó en detenerlo en la
forma en que lo hizo.
A partir de ese momento, Ginobili es conocido por varios
como ‘Batman’ o ‘Batimanu’.
Evidentemente la idea tuvo consecuencias, y el basquetbolista
argentino tuvo que aplicarse ocho vacunas contra la rabia. Tras este hecho, Manu
se mostró arrepentido por lo sucedido reconociendo la importancia de los murciélagos
para el ecosistema.
Al final, Manu seguirá siendo un ídolo para la afición de
San Antonio, e incluso para algunas caricaturas, porque ya llegó a aparecer
cono un ícono para la novia de Bugs Bunny. Cerca están los Spurs de un
campeonato más. Son los favoritos del Oeste, y si llegan a vencer, es muy
probable que ni Miami ni Boston encuentren la fórmula para superar a ‘Batman’ y
compañía.
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Por Juan Guzmán
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